Estoy en ASNEF y necesito un préstamo: lo que aprendí para salir adelante
Cuando uno cae en el fichero de morosos, siente que la puerta de las finanzas se cierra en la cara. Pedir un préstamo con ASNEF es una travesía llena de obstáculos, negativas y promesas que no siempre se cumplen. Lo sé porque yo estuve ahí. En este artículo, te contaré lo que descubrí, lo que funcionó (y lo que no), y cómo logré salir adelante sin que el sistema financiero me aplastara. Vamos allá.
Qué es ASNEF y por qué cambia todo cuando apareces en su lista
ASNEF (Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito) es una base de datos gestionada por Equifax. Si alguna vez dejaste de pagar una factura —aunque sea de 50 euros a una compañía telefónica— y esa empresa forma parte de ASNEF, puedes acabar inscrito como moroso.
Aparecer en ASNEF te cierra muchas puertas. No puedes pedir préstamos, alquilar con normalidad, ni contratar algunos servicios básicos. Las entidades financieras consultan esta lista antes de decidir si te prestan o no.
Desde mi experiencia, lo más duro no fue tanto saber que estaba en ASNEF, sino que, aun cuando pagué la deuda, seguí apareciendo allí. Descubrí que pueden tardar meses en actualizar tu situación, o incluso años si no haces el trámite tú mismo.

¿Se puede conseguir un préstamo estando en ASNEF?
Sí, se puede, pero con matices. No esperes condiciones favorables, ni tasas de interés bajas, ni grandes cantidades de dinero. Existen financieras especializadas que ofrecen préstamos con ASNEF, pero suelen pedir garantías adicionales: un coche, una nómina elevada, o incluso una hipoteca.
También hay prestamistas privados que no revisan ASNEF, pero ojo: algunos aplican intereses abusivos o cláusulas que te pueden llevar a una espiral peor.
En mi caso, llegué a hablar con más de 10 entidades. Algunas me pedían un avalista, otras querían una nómina fija de más de 1.200€, y las que ofrecían préstamos “rápidos” lo hacían con intereses por encima del 80% TAE.
¿Quién puede solicitar un crédito con el ASNEF?
Cualquier persona que aparezca en ASNEF puede intentarlo, pero conseguirlo dependerá de:
- La cuantía y antigüedad de la deuda
- Si tienes ingresos demostrables
- Si puedes ofrecer una garantía (hipoteca, coche, aval)
- Si la entidad financiera opera con riesgo alto
En mi caso, me encontré con que si tu deuda supera los 1.000€, ni las financieras más flexibles te lo ponen fácil. Lo curioso es que ni siquiera importaba si la deuda estaba en disputa: si figuraba en el fichero, era un no automático.
Alternativas reales para conseguir dinero con ASNEF
Aparte de los préstamos tradicionales, existen opciones como:
- Empresas de microcréditos: prestan pequeñas cantidades, pero revisa bien el TAE.
- Empeños: puedes usar tu coche u objetos de valor como garantía.
- Financieras con garantía hipotecaria: como Suitaprest, aunque implican un riesgo alto si no pagas.
- Préstamos entre particulares: legales, pero deben hacerse con contrato.
Yo llegué a probar incluso plataformas de financiación P2P, pero muchas también excluyen automáticamente si estás en ASNEF. Fue entonces cuando empecé a investigar otras soluciones más a largo plazo.
Lo que no te cuentan: bancos, financieras y la cruda realidad
Los bancos como BBVA, Santander, ING, etc., no te prestarán si estás en ASNEF o en la CIRBE con deudas activas. Así de claro. Incluso si la deuda es pequeña o está pagada, pueden tardar meses en sacarte del fichero.
Y si decides intentar con financieras privadas, te toca leer la letra pequeña. En una de mis experiencias, firmé un préstamo de 500€ que acabó costando más de 1.000€ en seis meses. Aprendí la lección: si necesitas dinero con urgencia, busca asesoría antes de firmar cualquier cosa.
La Ley de Segunda Oportunidad: mi escape definitivo
La única vía que realmente me permitió salir del agujero fue acogerme a la Ley de la Segunda Oportunidad. Esta ley te permite cancelar todas tus deudas en un plazo de dos o tres meses si cumples ciertos requisitos.
“Una de las mejores opciones para salir del listado de morosos y poder empezar de nuevo como ya hemos comentado anteriormente es acudir a la ley de la segunda oportunidad. Esto nos va a permitir salir rápidamente Y definitivamente de las deudas Y con ello tener acceso a operaciones que a día de hoy tenemos vetadas y que nos impiden poder seguir nuestra vida con normalidad.”
Gracias a esta ley, logré eliminar mis deudas (excepto las que tenía con Hacienda) y ser eliminado de ASNEF. Eso sí, necesitas asesoría legal especializada y paciencia. Yo lo hice con un despacho que me ofrecía estudio de viabilidad gratuito. Valió cada minuto invertido.
¿Cómo puedo salir del ASNEF sin pagar la deuda?
Legalmente, hay pocas opciones. Sin embargo:
- Esperar 5 años: la deuda desaparece del fichero por prescripción.
- Ejercer derechos ARCO: si la deuda no es cierta, puedes pedir que te eliminen.
- Acogerte a la Ley de la Segunda Oportunidad, si cumples los requisitos.
- Negociar con el acreedor para que retire tu nombre a cambio de un pago parcial.
Yo usé los derechos ARCO en un caso, pero solo funciona si realmente puedes demostrar que la deuda es errónea o ya ha prescrito. Si deseas saber más de cómo salir de ASNEF sin pagar la deuda.
¿Cetelem acepta ASNEF?
No. Según sus políticas oficiales, Cetelem no concede créditos personales a personas que aparezcan en ASNEF. Consultan tanto ASNEF como CIRBE antes de aprobar cualquier financiación.
Aunque algunas personas afirman haber recibido préstamos, probablemente fue antes de que se les notificara la inclusión en el fichero. Mi recomendación: si estás en ASNEF, olvida los bancos tradicionales y busca otras vías más realistas.
¿Cuando sales del ASNEF puedes pedir un préstamo?
Sí, pero depende. Una vez se borra tu nombre del fichero, las entidades dejarán de ver el “alerta”, pero la huella puede quedar en otros sistemas como la CIRBE o en informes internos de scoring crediticio.
En mi caso, aun saliendo de ASNEF, me denegaron varios préstamos porque figuraba en la CIRBE por un microcrédito antiguo. Tuve que esperar unos meses y limpiar mi historial por completo.
Recomendaciones si necesitas un préstamo urgente estando en ASNEF
- Evita estafas: nunca pagues por adelantado “para gestionar un préstamo”.
- Compara varias opciones: hay simuladores online que te dan una idea realista.
- Busca préstamos con aval si tienes propiedades.
- Negocia con tus acreedores actuales: a veces puedes conseguir cancelación de deuda parcial.
- Consulta si puedes acogerte a la Ley de Segunda Oportunidad. Es gratuita en la mayoría de bufetes al menos en la primera fase.
Cómo evitar caer de nuevo en listas de morosos
Una vez sales, lo último que quieres es volver a caer. Yo tomé medidas muy concretas:
- No firmo nada sin leer dos veces
- Uso alertas de pago automático para no retrasarme
- Solo pido financiación cuando es absolutamente necesario
- Llevo un control mensual de mis gastos e ingresos
- Consulto mi estado financiero cada trimestre
También puedes revisar si estás en ASNEF a través de Equifax, de forma gratuita una vez al año.
Pedir un préstamo con ASNEF es difícil, pero no imposible
Estar en ASNEF no es el fin del mundo, pero sí una gran piedra en el camino. Conseguir un préstamo requiere paciencia, comparar opciones y tomar decisiones bien informadas.
Yo logré salir adelante gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad, pero el camino no fue fácil. Mi consejo es que no te desesperes: infórmate, consulta con profesionales y actúa con cabeza. Hay vida financiera después de ASNEF.
Elimina información tuya de otras empresas para no acabar en ASNEF
Es fundamental entender que «Si estoy en ASNEF y necesito un préstamo» no solo depende de tus deudas, sino también de dónde están tus datos personales. Aunque tengas un buen control financiero, si empresas antiguas o acreedores te tienen guardado en sus bases, pueden enviarte directamente al fichero de morosos. Por eso es clave usar un servicio como CancelacionDatos.com para borrar tus datos innecesarios o erróneos.
Cuando yo estuve en esa situación, descubrí que el riesgo no venía solo de tener una deuda, sino de que mis datos seguían circulando: si alguien más los tenía guardados, podía desencadenar de nuevo mi inclusión en ASNEF. En ese momento supe que «Si estoy en ASNEF y necesito un préstamo» no quedaría solo resuelto pagando o reclamando; necesitaba recuperar el control sobre mis datos.
Gracias a CancelacionDatos.com, pude ejercer mis derechos ARCO con un solo clic, preparar cartas legales y enviar las solicitudes adecuadas. Eso me permitió limpiar mis datos de empresas que ni siquiera recordaba. Al final no fue solo una cuestión de dinero: fue recuperar mi reputación para evitar que volviera a repetirse el problema.
Tener presente que «Si estoy en ASNEF y necesito un préstamo» significa también entender quién tiene tus datos. Solo así puedes tomar medidas reales para evitar nuevas inclusiones. Herramientas como CancelacionDatos.com no solo ayudan a borrar tu historial, sino que te ahorran tiempo, estrés y te permiten estar en condiciones óptimas para volver al mercado financiero cuando lo necesites.
Y recuerda: todos tenemos derecho a una segunda oportunidad.





